Ritual de la sal para atraer la buena suerte

Ritual de la sal para atraer la buena suerte con la magia blanca

El ritual de la sal para atraer la buena suerte es uno de los poderosos rituales de brujería blanca para atraer la prosperidad y alejar lo negativo, así como proteger. La sal es un elemento natural que une la energía del sol y la fuerza del agua, lo que hace de éste, un ingrediente perfecto en rituales para atraer la buena suerte, limpieza de casas o negocios y atracción de lo positivo. La sal se emplea en muchos rituales de limpieza, así como también en muchos rituales de protección. Es importante que la sal que se utiliza en éste o cualquier hechizo de magia blanca, debe ser completamente natural y sin refinar o procesar, ya que si ha pasado por algún proceso de refinamiento o manipulación, pierde propiedades en este sentido.

Ritual de la sal para atraer la buena suerte

Por este motivo recomendamos adquirir la sal en herbolarios, tiendas naturales o tiendas esotéricas que garantizan la pureza y calidad del producto. La sal como protección y como limpieza es un elemento muy eficaz, ya se usaba hace cientos de años por los brujos y hechiceros para realizar poderosos rituales limpiadores y protectores. Este ritual que os presentamos para atraer la buena suerte y alejar la mala suerte, es uno de los más antiguos en la magia blanca, que a pesar de haber evolucionado y modificado alguno de sus procesos, mantiene intacta la esencia vital del mismo.

Materiales para el ritual de la sal para atraer la buena suerte

    • Sal marina sin refinar ni tratar
    • 1 plato llano blanco de cristal o cerámica
    • Hojas de ruda fresca
    • Aceite esencial de menta
    • 1 vela blanca
    • 2 velas grises




Realización del ritual de la sal para atraer la buena suerte

    1. Primero seleccionaremos la habitación de la casa donde vamos a realizarlo, se recomienda hacerlo en aquella en la que descansamos y nos relajamos, generalmente es el dormitorio. Es importante que esta habitación tenga ventilación al exterior a través de ventana o puerta. Procederemos a colocar los elementos sobre la mesa de la siguiente forma.
    2. La vela blanca ocupara el centro de la mesa, las dos velas griss irán una a cada lado separadas una cuarta de la vela blanca. Situaremos el plato delante de la vela blanca y haremos un círculo de sal marina al rededor de estas velas y el plato, de modo que las tres y el plato quedan dentro del círculo.
    3. Procedemos a encender la vela blanca y seguidamente la vela gris de la derecha y después la de la izquierda. Dedicaremos unos minutos a mandar toda nuestra energía a pensar en el aspecto o aspectos que deseamos atraer la buena suerte y la prosperidad. Hemos de visualizar lo que deseamos y queremos, de tal modo que seamos capaces de sentirlo como si lo tuviésemos delante o lo estuviésemos experimentando. Este proceso en los rituales de magia blanca es muy importante, ya que trabaja el subconsciente y atrae lo que deseamos de verdad con fuerza.




  1. Acto seguido pondremos las hojas de ruda fresca sobre el plato extendidas, añadiremos 10 gotas de aceite esencial de menta, siempre visualizando y atrayendo aquello que deseamos, así como alejar todo lo que no deseamos y queremos que desaparezca. Cubriremos las hojas con sal marina y volveremos a pedir aquello que deseamos, esta vez en voz alta. Haremos una petición personal a nuestro modo y con nuestro lenguaje, pidiendo lo que necesitamos en nuestra vida con fuerza y fe.
  2. Cuando hayamos acabado dejaremos consumirse las velas solas. Al término de éstas tiraremos los restos de cera y la sal del círculo fuera de la casa, si es posible tirarlos en un río o lugar donde corra el agua mejor. El plato con la ruda y las gotas de aceite esencial de menta cubiertas por la sal, lo colocaremos bajo nuestra cama y lo mantendremos allí durante 10 días, al día onceavo lo enterraremos en un campo o jardín donde crezcan plantas y flores.

Si el ritual da resultado y funciona eficazmente, se deben ver resultados en un plazo no superior a 10 días desde el día siguiente a su realización. Hay que evitar hacerlo en días de luna menguante o luna nueva. Mejor con luna llena o luna creciente. La simbología de este ritual de la sal para atraer la buena suerte y la prosperidad, está en que todo lo malo queda impregnado en la sal del círculo, que simboliza la protección contra lo malo y el corte contra lo negativo, mientras que la sal del plato y las ruda con el aceite esencial de menta, simbolizan el crecimiento y venida de todo lo bueno.